El publicista Juan Campmany en El Mirador del Flash de 1995.
Xavier Mas de Xaxás - Una de las muchas señas de identidad de la calle Tuset eran las agencias de publicidad. Tándem era una de ellas. La dirigía Juan Campmany. Fue él quien descubrió el local donde está el Flash. Había conocido a Leopoldo Pomés en la agencia Tiempo, también en la calle Tuset. Pomés era director creativo y socio de Tiempo, la agencia que había creado Leopoldo Rodés, uno de sus grandes amigos.
Leopoldo le encargó a Campmany que le buscara un local en la zona de influencia de la calle Tuset para una tortillería que quería montar con Alfonso Milá. Fue así como dio con el almacén que había enfrente de un aparcamiento en la calle Granada del Penedès.
Campmany recuerda que uno de los grandes aciertos de Leopoldo y Alfonso fue no hacer publicidad del restaurante que acababan de abrir sino conseguir que los clientes se convirtieran en su publicidad. El cliente del Flash es alguien “a quien muchos quieren parecerse” –dice Campmany en esta entrevista- y no hay publicidad que pueda superar este gancho.